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| Lizaso transforma la madera en arte. |
¡ Eva Sola
Tras su éxito en la VIII Bienal de Florencia, donde fue premiado con la Medalla de Oro, el escultor vasco Jesús Lizaso ha inaugurado una exposición en la que incluye el conjunto de su producción titulado ‘Ortotropías’, y que se exhibe hasta el día 7 de abril en la sala Kultur Leioa (Bizkaia). La obra expuesta está integrada por piezas realizadas en madera, actividad que ha conformado la producción artística de Lizaso en los dos últimos años. Esta especialización constituye una renovada realidad artística, ya que este escultor desarrolla y crea obra inédita que enriquece el panorama artístico de las formas.
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| El escultor vasco Jesús Lizaso recibió en Florencia la Medalla de Oro. |
De acuerdo con los críticos que
siguen a este artista der Basauri, “el contraste es intencionado y esencial. El
juego metal/madera, duro/blando, rugoso/suave, lejos de aislar las partes entre
sí, dota a la obra de lógica y significado”.
Va a ser inevitable que en la selección de obras ‘Ortotropías’, que se exponen ahora en Leioa, el espectador busque conscientemente similitudes y analogías con la realidad de Lizaso más cotidiana, ya que desde las más imponentes a las reducidas, todas las esculturas comparten una esencia lúdica e informal que invita a la imaginación… y al asombro.
Va a ser inevitable que en la selección de obras ‘Ortotropías’, que se exponen ahora en Leioa, el espectador busque conscientemente similitudes y analogías con la realidad de Lizaso más cotidiana, ya que desde las más imponentes a las reducidas, todas las esculturas comparten una esencia lúdica e informal que invita a la imaginación… y al asombro.
La madera
De acuerdo con los expertos, la madera se considera un material especialmente ortotrópico y, sin embargo, su maleabilidad es limitada. Por ello, Lizaso busca la expresividad, la ‘plasticidad’ plena, a través de una ductilidad simulada. La pretendida ‘mutación’ produce la ilusión, de modo que la materia parece haber sido presionada, flexionada o incluso rota.
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| La obra no oculta rectificaciones ni enmiendas. |
Se establece una paradoja entre lo
que el espectador cree lógico y lo que en realidad contempla. Es más,
inconscientemente quiere entender y saber qué clase de fuerza ha ejercido esa
transformación en una materia tan resistente como es la madera.
Además, la utilización de maderas naturales y sin procesar es clave en el proceso, pues exige un alto grado de reflexión y planificación. El escultor sabe y está obligado a conocer la singularidad de este trabajo creativo para poder controlarlo, tanto en la faceta de la transformación de la madera como del grado de inspiración, no siempre lineal y uniforme.
Sin embargo, la madera, como material vivo que es, implica a menudo correcciones y retoques que el artista, lejos de ocultar, asimila a la obra. Como resultado, la escultura se aleja de cualquier atisbo de producción industrial, acentuando su condición orgánica. “Lizaso no es carpintero, lo sabe, por eso ve en la madera algo más: un infinito de formas”, dicen los críticos.
Además, la utilización de maderas naturales y sin procesar es clave en el proceso, pues exige un alto grado de reflexión y planificación. El escultor sabe y está obligado a conocer la singularidad de este trabajo creativo para poder controlarlo, tanto en la faceta de la transformación de la madera como del grado de inspiración, no siempre lineal y uniforme.
Sin embargo, la madera, como material vivo que es, implica a menudo correcciones y retoques que el artista, lejos de ocultar, asimila a la obra. Como resultado, la escultura se aleja de cualquier atisbo de producción industrial, acentuando su condición orgánica. “Lizaso no es carpintero, lo sabe, por eso ve en la madera algo más: un infinito de formas”, dicen los críticos.
Un artista diferente
Las obras de Lizaso se encuentran repartidas en diversas plazas y espacios urbanos de localidades vascas como Mungia, Erandio, Basauri y Barakaldo o Huarte; en capitales como Madrid, Barcelona, Málaga, Palencia… así como en ciudades estadounidenses (Chicago e Indiana, de momento).
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| El artista elimina la rigidez de la madera y la hace moldeable. |
Concretamente en Basauri (Bizkaia),
localidad donde reside el artista, ganó en 2002 el concurso escultórico para
dotarla de su ‘símbolo’, materializado hoy en una monumental y entrañable
escultura, admirada por los vecinos y por los foráneos que visitan la localidad
vasca.
A través de sus críticas, diferentes expertos han reconocido que Lizaso es un artista diferente, con obra singular y propia. Lo consideran hoy distante de cualquier analogía o parecido con anteriores propuestas, y reconocen que se esfuerza continuamente por encontrar el cauce que le conduzca a la creación palpitante, genuina, armoniosa y vital, que sólo puede ser comprendida por su intuición de verdadero artista, obstinado y consciente de su cualidad de creador.
Más información, Ayuntamiento de Leioa: 656.78.26.00 www.kulturleioa.com
A través de sus críticas, diferentes expertos han reconocido que Lizaso es un artista diferente, con obra singular y propia. Lo consideran hoy distante de cualquier analogía o parecido con anteriores propuestas, y reconocen que se esfuerza continuamente por encontrar el cauce que le conduzca a la creación palpitante, genuina, armoniosa y vital, que sólo puede ser comprendida por su intuición de verdadero artista, obstinado y consciente de su cualidad de creador.
Más información, Ayuntamiento de Leioa: 656.78.26.00 www.kulturleioa.com